Para ti, siempre soy libre.

La compañía más preciada no es un regalo caro, sino la disposición a dedicarte tiempo. Puedo estar completamente desocupada por ti, responder mensajes al instante y atender llamadas en cualquier momento, solo porque eres importante. Siempre estoy ahí cuando me buscas, no porque no tenga nada que hacer, sino porque vales la pena dejar todo lo demás de lado. Mientras estés aquí, nunca estaré ocupada.